No es oficial, pero, sin embargo, la idea está muy avanzada: Chelsea está pensando enviar a Auschwitz a sus aficionados antisemitas para realizar un curso de concienciación en lo que fue uno de los campos de concentración nazi.

“Si solamente prohíbes entrar a la gente, nunca cambiará su comportamiento. Esta política les da la oportunidad de ver lo que han hecho y hacer que se comporten mejor”, señaló el presidente del club londinense, Bruce Buck. Hasta el momento, a los seguidores que son identificados por realizar insultos racistas o manifestaciones antisemitas, se les retira el abono, además de una correspondiente multa. Con la nueva posible medida, se les dará a elegir: cancelación del abono o Auschwitz.

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Hace poco, sin ir más lejos, hubo un polémico canto dedicado a Álvaro Morata: “He has come from Real Madrid, he hates the fucking yids (ha venido del Real Madrid y odia a los p… judíos)”. El español, pese a mostrarse agradecido por los apoyos que le dieron en su bienvenida, pidió no volver a escuchar esa canción.