Fue uno de los rumores de la temporada de fichajes. Tras la partida del ariete sueco Zlatan Ibrahimovic al Manchester United, la dirigencia del París Saint-Germain buscó dar un golpe potente, arrebatándole el astro brasileño Neymar al Barcelona. Para ello, presentaron una oferta en la que no escatimaron en gastos.
El agente del ariete brasileño, Wagner Ribeiro, relató a ESPN Brasil algunas de las atenciones que buscaba darle el PSG a Neymar si decidía cambiar de aires. De partida, el club francés estaba dispuesto a pagar los 190 millones de euros de su cláusula de rescisión, además de abonarle un descomunal salario de 40 millones de euros netos durante cinco temporadas. Sobre la selección, pondrían a su disposición un jet privado con el que podría desplazarse hasta Brasil cada vez que tuviera compromisos internacionales. Por si fuese poco, le ofrecieron darle un alto porcentaje de una red de hoteles que estaba levantando el presidente del cuadro galo, Nasser Al-Khelaifi.
Pese a que la oferta era suculenta, y que según reconoció el agente, Neymar pensó seriamente, su decisión fue negativa y prefirió seguir en Barcelona, club en el cual se siente feliz.