Luego de superar una lesión, que lo dejó al margen de la caída por la mínima ante Brighton en la fecha pasada, Alexis Sánchez se enfundó la camiseta del Manchester United y volvió a la titularidad para asegurar de forma matemática (con 78 unidades) el subcampeonato de la Premier League.

Lo hizo en el empate sin goles ante el West Ham, en el duelo pendiente por la jornada 31 de la Liga inglesa donde el equipo de José Mourinho buscaba recortar puntos para asegurar el segundo lugar y así acceder de manera directa a la próxima edición de la Champions League.

Con Jesse Lingard de protagonista, moviendo todos los hilos y disfrutando de su sociedad en punta con el chileno, el DT portugués probó un 3-5-2 para mantener la presión alta en campo rival, sin embargo, y pese a que el equipo rojo dominó a su rival en el Estadio Olímpico de Londres, se fueron sin goles al descanso.

Scott McTominay fue clave en el medio y Luke Shaw se lució por la banda en defensa y en ataque. De hecho, el Niño Maravilla se encontró en una pared con el lateral inglés y tuvo una inmejorable ocasión de gritar: a los 23’ el formado en Cobreloa pegó una volea infernal, pero el arquero de los Hammers Adrián se hizo gigante y logró rechazar. En la misma acción, Shaw tomó el rebote y ejecutó para terminar sacudiendo el poste derecho.

En la segunda etapa, nuevamente estuvo cerca el equipo visitante. En una notable jugada creada por Alexis, Paul Pogba quedó con la chance del remate, pero la pelota terminó a centímetros del segundo vertical. Finalmente, el ex Barcelona no pudo gravitar, tuvo menos el balón y salió reemplazado en el epílogo permitiendo el ingreso de Ashley Young al 92’. En total, logró un 84.7% de precisión en los pases y solo un remate a portería.

En la próxima jornada del certamen local, el cuadro de Guardiola vivirá su último compromiso como local ante el Watford en el Old Trafford, mientras que los de David Moyes recibirán al Everton. Esto previo a la final de la FA Cup donde el ex Arsenal se medirá con Chelsea en Wembley. Ese trofeo se presenta como la gran ocasión de terminar el año con un título y poder salvar el honor. La final entre el United y los Blues será una reedición de la que disputaron ambos equipos en 2007.

 

Fuente: OPTA