Solo 12 minutos le bastaron a Arturo Vidal para ganarse un lugar en la historia del Barcelona… y del Real Madrid. El volante chileno anotó el quinto gol azulgrana en el Clásico, el que cerró la goleada y el que completó la ‘manita’ de los locales frente al eterno rival.
Después de varias semanas, por fin ya no se hablará de los mensajes que el oriundo de San Joaquín sube a sus redes sociales, de sus muestras de desagrado por ser suplente en el conjunto catalán, de los “problemas” que generó su arribo al vestuario culé; ni las reprimendas del técnico Ernesto Valverde.
Esta vez se hablará de que el ex Bayern Munich entró en el clásico mayor de España luego de aprovechar un centro de Ousmane Dembélé, conectando un cabezazo perfecto que le permitió decretar el 5-1 que le costó, a la postre, el despido de Julen Lopetegui en los blancos.
Su rol en el derbi parecía condenado a ser secundario ya que su entrenador nuevamente lo relegaba a la suplencia, pero avisó que está dispuesto a aprovechar en plenitud sus chances. Tardó apenas dos minutos en batir al belga Thibaut Courtois, después de tocar en siete oportunidades la pelota, y tuvo un cien por ciento de efectividad mientras estuvo sobre el terreno de juego del Camp Nou.
Su primer tanto oficial con los catalanes presentó lo que se ha transformado en su marca registrada: dar que hablar en los clásicos. En el balompié nacional lo vivió defendiendo la camiseta de Colo Colo ante Universidad de Chile y Universidad Católica.
Frente a los azules dejó su sello en un duelo que “encendió” con Mauricio Pinilla. Mientras que en el mismo 2007, se enfrentó a Gary Medel en el único compromiso en que ambos se toparon en Primera División. En 2015 se encontraron defendiendo a la Juventus y el Inter de Milán. Antes, eso sí, puso su firma tras marcar a los 18 segundos uno de los goles más rápidos que recuerde el clásico italiano en 2012.
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Con los bávaros vivió varios cruces ante Borussia Dortmund, sin embargo, aún se le recuerda el 8 de abril de 2017, cuando dejó en segundo plano el triunfo por 4-1 al trancar con la cabeza el balón a Dembelé, en una jugada que quedó en los registros de la temporada en la Bundesliga.
Ahora, se metió en la historia de los hispanos, tal como Iván Zamorano y Alexis Sánchez. Eso sí, el ex Bayer Leverkusen es el único nacional que logró entrar al ‘club de las manitas’, el de los futbolistas que han cerrado las grandes goleadas históricas del Barça contra el Merengue.
Tal como lo logró Jeffren en la temporada 2010-11, luego de cerrar el 5-0 que le propinó el equipo de Pep Guardiola al de José Mourinho. O como Iván Iglesias, en la campaña 93-94, tras decretar la goleada 5-0, de aquel Barcelona de Romario.
El primero en correr a su encuentro fue Luis Suárez, con una sonrisa que destrozó los rumores que hablaron de una mala relación del camarín con el chileno. “Muy contento por Arturo, por lo que es como compañero. Creo que viene demostrando una gran profesionalidad, aparte de no tener los minutos que él quiere, pero contento por él. Entrar en un partido de estas características y hacer un gol en el Camp Nou, creo que debe ser una tarde noche inolvidable”, declaró el charrúa, autor de tres conquistas.
Vidal deberá seguir bregando desde el banco de suplentes en un equipo que tiene muchos protagonistas, pero su DT ya avisó que dejará de ser “mendigo” para volver a ser el “Rey”. “Arturo es un jugador del cual esperamos mucho. Es un jugador que ha caído muy bien aquí, con ese entusiasmo y lucha. Nos transmite mucho, es diferente a otros”, dijo Valverde. “El gol es un premio para él. Contra el Inter entró muy bien, hoy también. Esperamos que vaya jugando partidos, porque va a jugar”, cerró.