A casi diez días de ser despedido, Antonio Mohamed decidió romper el silencio y apuntó sus cañones contra el Celta de Vigo. “Si sabía que iba a ser juzgado en la cuarta o quinta fecha, no hubiera venido”, declaró el argentino en el programa Ao contraataque de la Radio Galega.

El exentrenador del conjunto gallego manifestó además que él estaba todavía evaluando al equipo. “Lo que me duele es que del otro lado me evaluaron mucho más rápido. El Celta no era un equipo campeón, era un equipo que seguía manteniéndose donde estuvo el año pasado. El equipo no estaba tan mal”, expresó el Turco. Y agregó: “Así es esto del fútbol. Fue duro y lo acepto, aunque no lo comparto para nada”.

Por otra parte, Mohamed se refirió también a la responsabilidad de los futbolistas, asegurando que el problema “más grave” es que los jugadores llegan a Balaídos con la idea de “ser vendidos a otro equipo”. Y remató su explicación con otra frase que no esconde su bronca: “Uno buscaba otra cosa diferente y no fue aceptado. Por eso, me tengo que ir a mi casa, pero el fútbol pone a cada uno en su sitio”.