Las fuerzas parejas. Universidad de Chile fue hasta la quinta región interior con el fin de que Hernán Caputto extendiera a dos partidos su rendimiento perfecto, pero solo pudo rescatar un punto en una jornada en la que cualquiera de los dos equipos lo pudo ganar. Fernando de Paul, el arquero azul, mantuvo el cero en el penal que desaprovechó Marcelo Larrondo, y a una semana del Clásico Universitario en las huestes azules parece imposible dejar de lado la preocupación por la tabla del descenso.
El primer tiempo trajo consigo aproximaciones más claras de la U. Gonzalo Espinoza sirvió un libre directo hasta impactarlo en el larguero y lideró un contragolpe que acabó con un empalme desviado de Marcos Riquelme ante la salida del área del meta Augusto Batalla. Sobre el término, Riquelme sirvió para Camilo Moya y la dirección no fue la óptima. Nico Oroz tampoco apuntó al marco y el local no despertaba. Aunque no tardaría en hacerlo.
La charla de Meneghini surtió efecto y los cementeros se remecieron para salir con más fuerza a disputar el complemento con sus mejores armas. Así, Nicolás Stefanelli finiquitó un ataque directo asistido por Marcelo Larrondo y De Paul se estiró excelente. Erick Wiemberg pudo concretar un balón parado que pasó muy cerca. De Paul luego atajó un penal a Larrondo, adivinándole la dirección de su disparo abierto. Y tanto Stefanelli como Ariel Cáceres desaprovecharon dos ocasiones inmejorables frente al nacionalizado chileno. Fue de esas tardes en las que el gol no era parte de la lista de invitados. Los de Paqui no inquietaron el segundo lugar de Colo Colo.
El debutante Leonardo Fernández fue la mejor noticia para Caputto. Su incorporación le devolvió el alma a la diluida ofensiva de los universitarios con un par de tiros sobre el desenlace. Batalla le ganó un mano a mano cuando ingresó al área chica y percutó de zurda, y tras un córner se ubicó como punta derecho, bajó la pelota con el pecho y esta vez atinó a darle de derecha. Fuera. Como todas en otro cero a cero más por el torneo chileno.