Universidad Católica y O’Higgins ofrecieron un espectáculo de bajo nivel en cuanto a generación de llegadas de peligro y ejecución de las mismas, que se extrañaron en San Carlos de Apoquindo en la tarde del domingo que repartió puntos en un cero a cero que le permite a los franjeados disfrutar del primer lugar con más fuerza: los resultados de la fecha 21 los mantienen con 13 puntos de ventaja con respecto a su escolta, que ahora es Audax Italiano mientras Colo Colo no ve una en el torneo.
En el primer lapso Sebastián Sáez cedió para que José Pedro Fuenzalida rematara de volea a las manos de Miguel Pinto. Paulo Magalhaes, en tanto, cerró en la línea tras un centro del Chapa que conectó de taco el Sacha.
La UC dio 501 pases y nunca logró encontrar los caminos que la llevaran a anotar un gol. Gustavo Quinteros, en esa búsqueda, terminó presentando en cancha un bloque de ataque con tres centrodelanteros (Riascos, Sáez y Valencia) y, por ende, la misión para sus extremos y laterales era que llovieran los centros. César Pinares lo hizo dos veces, pero los cabezazos de Riascos y Valber Huerta no fueron direccionados correctamente.
Incluso la Celeste, que más bien esperó y bregó por ralentizar el ritmo de un partido muy opaco, pudo ganarlo. Sobre el minuto 90, Agustín Doffo vio bien ubicado a Albert Acevedo y el zaguero -cual 9- despachó un potente tiro con su empeine que se fue abriendo y no encontró el ángulo esperado, mientras Matías Dituro le seguía la trayectoria al balón.
Católica sostiene la ventaja, O’Higgins cierra la jornada en zona de Copa Sudamericana y tanto Quinteros como Figueroa dan un paso adelante en sus objetivos personales y grupales. El punto, cuando no apremia una situación incómoda en la tabla, siempre suma. Y la cima es más que indiscutible para el azul y el blanco y la franja en el pecho.