La Primera División del fútbol chileno sigue detenida tras 24 jornadas y apenas se pudo disputar un partido, el de Cobresal y Unión Española, antes de suspender la fecha 26 que se iba a jugar este fin de semana. Por lo mismo, la ANFP estudia cómo hacerle frente a las potenciales pérdidas económicas de parte de los clubes.

Es que, al menos en el fútbol de honor, los 195 millones de pesos que recibe cada club por mes de parte de Turner son fundamentales para pagar las remuneraciones de jugadores, cuerpos técnicos y funcionarios, pero el contrato establecido con la empresa que rige el CDF estipula que deben jugarse 30 fechas… y recién el martes en el Consejo Extraordinario de Presidentes se decidirá si podrán o no jugarse, si habrá o no público y si el torneo sigue o no. De no continuar, se incumpliría una de las reglas principales para ejecutar el pago mensual.

Según apuntó El Mercurio, “para compensar al CDF, en Quilín evalúan presentar una extensión de dos o tres meses del negocio suscrito con el grupo Turner. El vínculo comercial se estipuló hasta fines de diciembre de 2033, y la idea es alargarlo 60 o 90 días, vale decir, hasta marzo de 2034, siempre que el presente torneo se suspenda definitivamente”.

El citado medio agregó la visión de una fuente dirigencial, que señaló que “se ve difícil reanudar el fútbol. Se deben analizar todos los escenarios”. CDF todavía no se pronunció de forma oficial frente a esta posible extensión del contrato con la ANFP.