El delantero chileno estuvo espléndido pero no alcanzó a marcar más diferencias en los minutos que recibió de parte de Conte. Y pierde otro objetivo.
Alexis Sánchez entró cuando el Inter de Milán buscaba el gol de la clasificación a como diera lugar. Antonio Conte explotaba sus posibilidades tras caer en el Giuseppe Meazza el 12 de febrero pero la férrea defensa del Napoli, liderada por el colombiano David Ospina, impidió la remontada. Por lo mismo el elenco de Gattuso se verá las caras con Juventus en la final del 17 de junio, mientras que el chileno deberá conformarse con el regreso de la Serie A. Así, se le escapa su mejor oportunidad de título en Italia aunque mantiene vigente la opción de conquistar la Europa League.
Ospina fue factor en los 18 minutos y 5 de descuento que jugó el nacido en Tocopilla en San Paolo, donde ejecutó correctamente el 100% de los pases que intentó e incluso se animó a patear al arco con una mediavuelta que pasó cerca. Unos instantes más tarde, Sánchez quedó posicionado como 9 frente a Ospi, su ex compañero y amigo en Arsenal, pero decidió meter un taco atrás: Eriksen percutó y el cafetero se lució, como continuó destacando hasta que se agotó el reloj, el mejor amigo del Nápoles y el peor del Nerazzurri (el 1-1 se sumó al 1-0 de la ida).