El Flamengo, vigente campeón de la Copa Libertadores, logró una victoria por 3-0 contra el Bangu en el partido que supuso el regreso del fútbol a Sudamérica tras tres meses de parón por la Covid-19, en partido del Campeonato Carioca.

El uruguayo Giorgian De Arrascaeta, que el 14 de marzo había marcado el último gol del Flamengo antes de la paralización por la Covid-19, abrió el marcador con un gol en el minuto 18 y encarriló la plácida victoria flamenguista.

En la segunda mitad, Bruno Henrique, en el minuto 66, y Pedro Rocha, en el 89, certificaron el triunfo del actual campeón sudamericano y de Brasil.

El partido se disputó a puerta cerrada en el mítico estadio del Maracaná de Río de Janeiro, a pocos metros de uno de los hospitales de campaña instalados en la ciudad para atender a pacientes con la Covid-19.

El técnico flamenguista, el portugués Jorge Jesús, salió con el mismo once con el que jugó en noviembre la final de la Copa Libertadores contra el River Plate argentino, con un único cambio obligado: el central español Pablo Marí, traspasado al Arsenal inglés, fue reemplazado por Léo Pereira.

Se cumplen 70 años de la inauguración del Maracaná

El histórico y modesto Bangu, equipo de la Serie D brasileña, apenas inquietó la portería de Diego Alves, a pesar de la evidente falta de ritmo de su rival. El encuentro sirvió también para celebrar los 70 años de la inauguración del mítico estadio del Maracaná, que se cumplieron esta semana.

El partido pudo disputarse después de que el alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, autorizara el lunes la disputa de eventos deportivos a puerta cerrada, con lo que la Federación de Fútbol del Estado de Río de Janeiro anunció un día después el regreso del Campeonato Carioca, paralizado a mitad de marzo.

Antes del duelo, aficionados del Flamengo, Bangu, Fluminense, Vasco da Gama, Botafgo y América, protestaron en una de las entradas del Maracaná con pancartas contra el gobierno federal, el gobierno regional y la alcaldía de Río de Janeiro por el regreso del fútbol.

Los jugadores de ambos equipos tuvieron su temperatura medida al llegar al estadio, mientras que los periodistas y fotógrafos tuvieron que pasar por un túnel de desinfección.

Los dos conjuntos guardaron un minuto de silencio en homenaje a las casi 50.000 víctimas mortales de la Covid-19 en Brasil. El Flamengo también homenajeó antes del encuentro a su masajista Jorginho, quien falleció a inicios de mayo víctima del virus.