Con un tanto de Lionel Messi de penalti, Argentina superó por la mínima diferencia a Ecuador el jueves en el estadio La Bombonera en Buenos Aires, en el inicio de las eliminatorias sudamericanas al Mundial Catar-2022.
El crack del Barcelona, a los 13 minutos, clavó un zurdazo desde los 12 pasos, bien esquinado junto a un poste, aunque el guardameta Alexander Domínguez alcanzó a manotear la pelota.
«Es un año complicado para todo el mundo. Con la Selección intentamos darle una alegría a la gente con esta victoria, en una situación difícil (por la pandemia de covid-19), y más allá del juego, que no fue el que queríamos», dijo el capitán de la Selección.
Banderas de aliento al goleador histórico de la Albiceleste fueron colgadas en las tribunas y un sistema de 30 altavoces difundió grabaciones de estribillos entonados por la hinchada argentina, para poner al menos pasión de fantasía en un estadio huérfano de emociones en la cancha y en las gradas.
El DT de Ecuador criticó el penalti señalado de Argentina
El DT argentino de la Tricolor, Gustavo Alfaro, manifestó su disconformidad con la sanción del tiro desde los doce pasos: «El partido se dispara con una jugada controvertida. Me deja muchas dudas. Honestamente no fue penal».
El partido fue un somnífero, ideal para dormir plácidamente. Los dos equipos presionaron sobre el poseedor de la pelota. Nadie armaba juego. Nadie se desmarcaba. A nadie se le prendía la lamparita, ni se le caía una idea.
Messi estuvo un tiempito intenso y después se apagó al no encontrar socios. No hubo ritmo ni frescura creativa en Rodrigo De Paul o Leandro Paredes.
En Argentina sólo aparecían los destellos del infatigable luchador Marcos Acuña. A veces aparecía amenazante en el área Lucas Ocampos, como en el penal que le cometió Pervis Estupiñán.
El arquero argentino Franco Armani era espectador privilegiado salvo cuando pasó algunos sustos con apariciones sorpresivas de Erick Fenigra y Estupiñán.
Domínguez tampoco pasaba zozobras bajo los tres palos ecuatorianos, salvo cuando le tapó un tiro a quemarropa a Ocampos. Sus guardianes, Xavier Arreaga y Robert Arboleda, le pusieron candado al centro de la defensa.
Argentina visita la altura de La Paz en la segunda fecha
Argentina jugará el martes próximo frente a Bolivia en la La Paz (3.600 metros de altitud) y Ecuador recibirá a Uruguay en la también elevada Quito (2.850 metros).