El Chelsea no termina de despegar y, después del ‘set’ endosado a los Wolves, no fue capaz de pasar del empate (1-1) ante un Crystal Palace al que habían derrotado en los últimos 13 precedentes. Nico Jackson abrió la lata en la primera mitad. Pero, nada más volver de vestuarios, Eze se sacó un golazo de la chistera del que los ‘blues’ no consiguieron reponerse. Los de Maresca siguen sin conocer la victoria en Stamford Bridge.
A Maresca le convenció el plantel que puso a disposición la semana pasada contra los Wolves y repitió el mismo once… a excepción de Mudryk, que ya fue sustituido en The Molineux al descanso. Su lugar en la banda izquierda fue ocupado por un Pedro Neto que, al igual que todo el equipo, arrancó muy entonado el encuentro.
Sin embargo, fue por derecha por donde el Chelsea comenzó a fabricar las primeras ocasiones gracias a la sociedad que están empezando a conformar Cole Palmer y Noni Madueke. El Crystal Palace se sostuvo como pudo hasta que, en el 25′, Nico Jackson puso el 1-0 tras una gran contra liderada por ambos ingleses. Segunda jornada consecutiva marcando para el ariete senegalés, que en los próximos días ampliará su contrato hasta 2033.
Lejos de bajar el ritmo, el Chelsea siguió siendo dueño y señor de un partido al que se tuvo que ir con una renta mucho mayor al descanso. Y es que, salvo un par de disparos lejanos, el Crystal Palace apenas incomodó a un Robert Sánchez que vivió como un espectador más el primer acto. De hecho, el propio Nico Jackson pudo irse con doblete tras un cabezazo franco desde el punto de penalti.
No quería relajaciones Maresca tras el descanso y Palmer rozó el gol con un lanzamiento de falta que Dean Henderson sacó de la escuadra. Estaba dormido el Palace. Pero fue entonces cuando Eze recogió un balón suelto en el balcón del área para poner el 1-1 en el 53′ haciendo inútil la estirada de Robert Sánchez.
El empate acabó despertando a un Crystal Palace que, en 10′ de la segunda mitad, ya había generado más peligro que en todo el primer acto. Maresca, por su parte, no tardó en reaccionar e introdujo a Joao Félix antes de llegar a la hora de partido para tratar de agitar la coctelera. Le había hecho mucho daño el tanto de Eze a un Chelsea que mostró signos de debilidad mental ante la adversidad.
Los problemas empezaban a acumularse y, a falta de 15′, Malo Gusto tuvo que abandonar el campo por lesión. Sin Reece James, que sigue cumpliendo sanción, Caicedo tuvo que ocupar el lateral derecho y dejó a Enzo como única referencia en medio campo. El equilibrio, lógicamente, brillaba por su ausencia. Pero el Palace desaprovechó varios contragolpes claros para acabar llevándose el partido.
Desde aquella ocasión de Palmer al inicio de la segunda parte el Chelsea no volvió a intimidar a Dean Henderson hasta que Nico Jackson, en el descuento, perdonó un mano a mano. Apretaron los ‘blues’ durante los últimos minutos, pero les faltó imaginación para romper el bloque defensivo que instaló un Crystal Palace que se acabó llevando el primer punto del curso en su visita al Bridge. Un campo en el que no puntuaba desde 2017.