Libertad de Paraguay, finalmente, tenía razón en torno a la polémica sobre la suspensión que pesaba sobre Ramón Ábila, que le impedía disputar la serie que finalmente Boca ganó por un aplastante 6-2, en los octavos de final de la Copa Libertadores.

Luego del encuentro de ida, que terminó en triunfo del Xeneize con un gol del ex-delantero de Huracán, corrieron rumores de una sanción que aún debía cumplir el jugador en cuestión. Las sospechas aumentaron cuando Wanchope no fue incluido en el juego de vuelta, viajando con el plantel del Xeneize a Asunción pero sin participar por una supuesta lesión, que luego se confirmaría que no era tal: el cordobés no ingresó porque Boca no estaba seguro de que no debiera ninguna sanción.

A raíz de todo esto, luego de que se confirme que Ábila no estará en la ida de cuartos por una suspensión adeudada y, además, por una lesión muscular, el club Gumarelo solicitó “la aclaración correspondiente, de suerte a que quede definitivamente establecido si el citado jugador estaba o no habilitado para el partido de referencia”, según un comunicado de la Comisión Directiva en el que se cita al sistema COMET de la CONMEBOL y se explica a los hinchas que ningún hecho irregular se pudo constatar en relación a Ramón Ábila en el día del partido ida disputado en Buenos Aires, por lo que no había nada que objetar en ese momento.

La respuesta oficial llegó y, efectivamente, Wanchope aún “cuenta con un partido de suspensión pendiente de cumplimiento”. Además, desde la entidad informan el funcionamiento del mencionado sistema y se aclara que el club ya no puede realizar ningún reclamo, aunque logró al menos exponer el grave error.

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