Después de semanas y semanas de complejas negociaciones, los dirigentes del Manchester City dieron con la fórmula correcta para cumplir el gran anhelo de Pep Guardiola: fichar al central John Stones, pilar de la defensa del Everton.
El futbolista de 22 años se transformó en la gran obsesión del nuevo DT de los Citizens, por lo cual el dinero no era pretexto para no entregarle una pieza fundamental en su nuevo proyecto deportivo. Si bien no se ha entregado la información oficial, serían 50 millones de euros los que permitieron que Stones deje la ciudad de Liverpool para arrimarse a Manchester.
Tras cerrarse el tema del defensa, la única pieza que falta en el tablero de Pep Guardiola es la portería.
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