Las Grandes Ligas acusaron el miércoles 28 de octubre a Justin Turner, figura de los Dodgers, de saltarse los protocolos de prevención contra el coronavirus al festejar con sus compañeros el título de Serie Mundial 2020 pese a dar positivo en una prueba.
En un duro comunicado, la MLB anunció la apertura de una investigación sobre el comportamiento de Turner, al que señaló por poner en riesgo a otras personas, tras el triunfo del martes sobre los Rays de Tampa Bay en el estadio del Globe Life Field de Arlington, Texas.
El tercera base de los Dodgers de Los Ángeles tuvo que abandonar el juego en la octava entrada después de que su equipo fuera informado de que había dado positivo por covid-19 en la prueba de ese día.
A Turner se le pidió que se aislara inmediatamente del resto del banquillo de los Dodgers por precaución pero, terminado el juego con el triunfo 3×1 de su equipo, el jugador se unió a las celebraciones del primer título de la franquicia angelina desde 1988.
Turner, de 35 años, saltó al campo acompañado por su esposa portando ambos mascarilla aunque posteriormente se las retiraron para las fotografías.
«Al recibir el aviso del laboratorio de una prueba positiva, se activaron los protocolos que llevaron al retiro de Justin Turner del juego de anoche», explicó la MLB este miércoles.
«Turner fue puesto en aislamiento por la seguridad de quienes le rodean. Sin embargo, tras la victoria de los Dodgers, está claro que Turner eligió ignorar los protocolos conjuntos acordados», señaló.
«Aunque el deseo de celebrar es comprensible, la decisión de Turner de abandonar el aislamiento y entrar en el campo fue errónea y puso en riesgo a todas las personas con las que entró en contacto», subrayó la liga. «Cuando la seguridad de la MLB planteó el asunto (…) él se negó enfáticamente a cumplir».
«La oficina del comisionado está comenzando una investigación completa sobre este asunto y consultará con la Asociación de Jugadores dentro de los parámetros del manual de operaciones conjuntas de 2020», avanzó.
La MLB dijo que los jugadores de los Dodgers y los Rays se sometieron a pruebas de coronavirus la noche del martes y este miércoles. El viaje de regreso de los equipos a sus ciudades será determinado por «las autoridades apropiadas», señaló la liga.
Sin síntomas
Nada más terminar el choque del martes, Turner mandó un mensaje por Twitter en el que agradecía las muestras de interés por su caso y afirmaba sentirse «genial» y no tener «ningún síntoma».
«Acabo de experimentar cada emoción que se pueda imaginar. ¡No puedo creer que no pudiera estar ahí fuera para celebrarlo con mis chicos!», escribió.
Sin embargo, con el festejo ya en marcha, el jugador rompió el aislamiento y regresó al césped, donde abrazó a algunos compañeros y se sentó junto al mánager Dave Roberts para las fotografías de grupo con el trofeo.
Turner posó primero con la mascarilla puesta pero posteriormente se la retiró. Sin ella besó a su esposa y ambos posaron con el trofeo.
ESPN reportó que la prueba de covid-19 a la que se sometió Turner el lunes no fue concluyente mientras que la del martes arrojó un resultado positivo que fue comunicado a la MLB durante el juego.
«Justin quería salir y tomarse una fotografía con el trofeo, y lo hizo», dijo el presidente de operaciones de los Dodgers, Andrew Friedman. «Con o sin eso, mucha de la gente con la que interactuó iba a estar en la red de rastreo de contactos».
Los compañeros de Turner, mientras tanto, lamentaron que no pudiera celebrar plenamente el triunfo.
«Quitarle eso es desgarrador», dijo Corey Seager, elegido Jugador Más Valioso (MVP) de la Serie Mundial. «Ese hombre merece más que nadie tomarse una foto con el trofeo, tener a su familia cerca, disfrutar de este momento».
Nacido en Long Beach, en las afueras de Los Ángeles, Turner se unió en 2014 a los Dodgers con los que vivió las decepciones de perder dos Series Mundiales consecutivas ante los Astros de Houston en 2017 y los Medias Rojas de Boston en 2018.
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Las últimas semanas de los playoffs de la MLB se llevaron a cabo con los equipos concentrados en sedes «burbuja» como la de Arlington para proteger a los peloteros del virus. En ese periodo no se registró ningún positivo previo al de Justin Turner.
Durante la temporada regular, que comenzó con cuatro meses de retraso y el calendario recortado por la pandemia, sí hubo numerosos contagios de jugadores que motivaron continuos cambios en el programa de juegos.