ERICK GUERRERO (IQUIQUE)
Le ganó a Everton y perdió tres juegos consecutivos. Fue cesado después de la cuarta fecha.
HUGO VILCHES (AUDAX ITALIANO)
Tras un año y ocho meses en el club, el ex futbolista de la U llegó a un mutuo acuerdo con la dirigencia para dejar el equipo. Lo condenó pasar, de un semestre a otro, de los primeros puestos a la zona del descenso. Perder contra Botafogo en condición de local aceleró su éxodo. Asumiría pronto Juan José Ribera.
PABLO GUEDE (COLO COLO)
Anunció su renuncia voluntaria después de quedarse con el Superclásico. El proceso venía gastado por la paupérrima campaña internacional (que luego corrigió Héctor Tapia).
AGUSTÍN SALVATIERRA (COLO COLO)
Antes de la asunción de Tito, Cucho se hizo cargo del primer equipo albo ante Temuco. Y cumplió: 2-0 con doblete de Paredes. No alcanzó a preparar el juego ante Curicó.
ÁNGEL GUILLERMO HOYOS (U. DE CHILE)
“Estoy humillado”, rezó Carlos Heller luego de que la U perdiera 0-7 ante Cruzeiro. Allí se agotó el proceso de quien tenía firmada su renovación hasta 2019.
GERMÁN CAVALIERI (PALESTINO)
La mala campaña le pasó la cuenta y su salida fue anunciada antes de jugar con la U en la fecha 14. Ganó, viéndolo desde la tribuna, y se fue.
MIGUEL RAMÍREZ (SAN LUIS)
Con el equipo en la antepenúltima posición, Cheíto llegó a un común acuerdo con la dirigencia canaria para ponerle fin a su exitoso proceso de tres años. Fue tras la caída 0-3 ante Universidad de Concepción.
ESTEBAN VALENCIA (U. DE CHILE)
Dirigió en las últimas cuatro fechas de la primera rueda: empató en San Carlos ante la UC y se despidió ganando a Huachipato y con el equipo laico en el cuarto lugar. Le pasó la cuenta la eliminación internacional: no pudo ante Vasco y quedó cuarto en el grupo. Frank Kudelka fue anunciado como su reemplazante.
