Definitivamente Paolo Guerrero no jugará el Mundial de Rusia 2018, representando a Perú, luego que el TAS decidiera ampliarle el castigo por doping a 14 meses.

El “Depredador” dio positivo en un control antidoping realizado tras el partido eliminatorio entre Perú y Argentina del 5 de octubre de 2017. La sustancia encontrada fue benzoilecgonina, principal metabolito de la coca y sus derivados como la cocaína.

El atacante mantenía la esperanza de que el tribunal rebajara la sanción, que inicialmente había sido de doce meses de castigo. No obstante,  la entidad determinó que finalmente serán 14 meses de inactividad del jugador, en un fallo que no es apelable.

La situación era favorable ya que podría jugar el Mundial sin problemas. Sin embargo, la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) no aceptó la suspensión y decidió apelar. El último 3 de mayo, día final de la sanción por 6 meses, Paolo Guerrero y la AMA se presentaron ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), con el fin de decidir el futuro final que tendría el jugador del Flamengo de Brasil.

Con esto, Guerrero, de 34 años, tendrá que cumplir otros 8 meses castigado y recién volverá a los campos de juego en el mes de enero. El futuro próximo del atacante es incierto. Durante los primeros meses de sanción, se mencionó mucho que Flamengo tendría pensado finiquitar el contrato con el goleador y la situación actual podría hacer que los rumores se vuelvan una realidad, considerando que tiene contrato vigente hasta agosto de este año.

El goleador peruano jugó tres partidos desde que culminó sus primeros 6 meses de sanción: Internacional, Ponte Preta y Chapecoense. Ante el último rival anotó la tarde de ayer.

En Perú se habla con insistencia que Ricardo Careca convocaría a Claudio Pizarro en lugar de Guerrero.