Colo Colo ya tiene definido su 2019, donde solamente restan las llegadas de refuerzos para la mitad del campo y dos delanteros.
Pedidos de primera necesidad para una escuadra que se ha mostrado permeable en los partidos amistosos, y de no tener pronto sus nuevos jugadores no lo pasarán bien en Copa Sudamericana ni en el Campeonato Nacional.
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Ante esto, Mario Salas quiere que su escuadra esté bien afinada, y que futuros jugadores tengan un buen trote para ser utilizados en un tiempo más.
Por eso es que el Comandante habló con dos canteranos a quienes le recomendó buscar nuevos rumbos, ya que ahora no están dentro de sus planes.
Fueron Jorge Araya y Ricardo Álvarez los que deberán ir por nuevos horizontes, por lo que se suman a la larga lista de elementos que han dejado la escuadra alba.
De esta manera en Macul deben sumar con urgencia nombres, y mermar el exódo masivo de jugadores.
