El Manchester City estudia sancionar a su internacional Kyle Walker después de que el jugador participara en una «fiesta sexual» en pleno periodo de confinamiento por la pandemia del coronavirus, días después de que el defensa hubiese aconsejado no salir de casa para evitar la propagación del virus.
El futbolista, de 29 años, se disculpó después de que el tabloide The Sun publicase que había invitado a dos jóvenes prostitutas y a un amigo a su apartamento el pasado martes, un día después de que Walker, en sus redes sociales, pidiese a sus seguidores que respetaran las consignas de distanciamiento social decretadas por el gobierno británico.
El Reino Unido sumó otros 621 fallecidos por el COVID-19 en las últimas horas, con una cifra total de 4.934 muertos, según los datos de este domingo 5 de abril.
«Quiero disculparme ante mi familia, mis amigos, mi club, los aficionados y el público por haberles decepcionado», declaró Walker en un comunicado.
«En estos momentos, hay héroes ahí fuera que hacen una diferencia vital para la sociedad y he querido apoyarles y destacar su sacrificio increíble por salvar vidas», añadió el defensa.
En un comunicado, el Manchester City explicó: «Nuestro cuerpo técnico y jugadores han estado trabajando en apoyo del increíble esfuerzo del NHS (Servicio Nacional de Salud) y otros trabajadores esenciales en la lucha contra los efectos del COVID-19 coronavirus en todas las maneras que podamos. Las acciones de Kyle han contravenido directamente estos esfuerzos».
«Lamentamos escuchar las acusaciones, tomamos nota del comunicado y las disculpas de Kyle y abriremos un expediente disciplinario interno en los próximos días», añadió el club.
Walker es el segundo futbolista de élite que incumple las medidas gubernamentales de confinamiento, después de que el capitán del Aston Villa, Jack Grealish, acudiese a una fiesta el pasado fin de semana y fuese fotografiado en pantuflas cerca de una carretera, después de haber publicado un video en el que instaba a los hinchas a permanecer en sus casas.