El central del Paris Saint-Germain Sergio Ramos admitió este lunes que le hubiese «gustado que me hubiera tocado otro equipo», tras quedar emparejado con el Real Madrid para los octavos de final de la Champions.
«El destino es muy caprichoso. Me hubiese gustado que me hubiera tocado otro equipo», dijo Ramos en acto para presentar una cadena de gimnasios con su nombre.
«Sabéis el cariño que tengo al Real Madrid, a la afición y eso no va a cambiar nunca, pero ahora toca afrontar el presente, soy jugador del PSG me toca defender a mi equipo y haré todo lo posible por intentar pasar la eliminatoria», afirmó el excapitán del equipo merengue.
«Va a ser un partido muy duro, ya veremos qué pasa. Para los amantes de fútbol es un grandísimo duelo, a mí me toca defender mis intereses y el PSG es el que ha apostado por mí», añadió Ramos, tras un sorteo que tuvo que repetirse por «problemas técnicos», según la UEFA.
«Cuando he llegado en el avión, el United era un equipo que me molaba como enfrentamiento, después el resultado del sorteo no era válido, se ha dado, el sorteo es el que es, nos ha tocado el Madrid», añadió Ramos, a cuyo equipo le había tocado en el sorteo invalidado el Manchester United.
«Es una mezcla de sensaciones, me hubiese gustado no tener ese enfrentamiento, pero por otra parte volver al Bernabéu, a mi casa, es algo muy alegre sobre todo para mí a nivel sentimental», concluyó.