Colo Colo se arma para 2023 con la expectativa más grande: volver a ser competitivo en la Copa Libertadores después de un fracaso internacional de 2022 marcado por duelos decisivos en los que fue remontado.

Junto con aquello, el Cacique de Gustavo Quinteros empieza el año disputando la Supercopa frente al monarca de la Copa Chile (y la B) Magallanes, y una semana más tarde se estrena en Copiapó por l Torneo de Primera División que arranca con los mejores del curso anterior tanto en el fútbol de honor como en el ascenso.

El periplo albo por la Libertadores va a arrancar después de la disputa de las primeras dos fases, por lo que recién en la semana del 15 de marzo se producirá el debut por la ronda grupal de una Gloria Eterna que está en las vitrinas del Estadio Monumental, que entiende más de nostalgia que de éxito internacional en el último tramo histórico y aspira a mejorar su presente.

Antes de embarcarse a Buenos Aires para el acondicionamiento de cara a la temporada, el Eterno Campeón, que se ha coronado por 33a ocasión en Coquimbo en el último octubre, cerró el 22 desarrollando su mejor fútbol venciendo al Betis de Pellegrini por goleada en Concepción y con Gil a la cabeza en Viña.