La presentación de Manchester United en su visita a Brighton fue opaca, triste, sin reacción para hacerle frente a un equipo local que fue sólido en casa. El equipo de José Mourinho, que no contó con Alexis Sánchez, perdió por 3-2 y preocupa su futuro en sólo dos fechas de la Premier League .

Glenn Murray marcó la ventaja, al minuto 25, en una sensacional definición con un toque de balón a la carrera para mandarla por encima de David De Gea. Antes que el United asimilara el golpe, el dueño de casa sacó provechó de la pasividad en la última línea tras un córner y, luego de tomar el balón cinco veces de un lado a otro en el área, Shane Duffy la mandó al fondo de la red.

Romelu Lukaku intentó la levantada con el descuento, a los 34´, en un cabezazo dentro del área chica para empujarla al gol. La debacle llegó a segundos del entretiempo, con un penal cometido por Eric Bailly sobre Peter Gross y que el propio delantero de Brighton se encargó de ejecutar. Pese al intento de De Gea por sacarla con los pies, el United se fue al descanso 3-1 abajo.

Paul Pogba fue el único que sacó la cara en el complemento mediante un disparo que se fue elevado. En los instantes finales, al minuto 95, el francés se encargó de un penal, tras falta sobre Marouane Fellaini, pero el descuento no alcanzó. Los de Mourinho se llevan un duro golpe del Falmer Stadium.