En su partido número 23 por LaLiga actuando como titular, y el primero en la 19/20, Arturo Vidal mantuvo su invicto. Con él en cancha desde el arranque por la competición, Barcelona nunca perdió y su decimoquinta victoria -tiene ocho empates- la consiguió ante Sevilla, en la resurrección blaugrana en Camp Nou (4-0).
Si ya a mitad de semana el chileno había forzado su estelaridad dominical con un segundo tiempo fundamental en Champions League ante Inter de Milán, Ernesto Valverde se decidió a sentar a Sergio Busquets y entregarle el mediocentro a Frenkie de Jong.
Vidal auxilió al holandés y de Arthur recibió una asistencia profunda. Se movió como 9 en el área, entre los dos defensores de los Nervionenses, y metió el 2-0 con la punta de su botín cuando Luis Suárez ya había abierto la cuenta. Tanto el uruguayo como Nélson Semedo gestaron el tanto del formado por Colo Colo. El VAR confirmó el festejo que se gritó dos veces en Catalunya.
Siete entradas y una precisión del 91% entre 45 pases fue la conclusión estadística de sus 70 minutos. Lo relevó Ivan Rakitic. Dembélé, la otra apuesta ganadora desde el banco, anotó el tercero y desaprovechó una chance inmejorable a pase de Vidal. Messi cerró la fiesta local con una joya de tiro libre. Con Arturo el Barça no sabe perder.