Tras 100 días sin fútbol, la Premier League se reanudó este miércoles 17 de junio con protestas antirracistas y un homenaje a las víctimas de la pandemia del nuevo coronavirus, en el país europeo más afectado por la enfermedad.
En el plano deportivo, el Manchester City derrotó por 3-0 al Arsenal e impide que el Liverpool pueda conquistar el título que lleva esperando 30 años el próximo domingo en el derbi ante el Everton.
Antes, Aston Villa y Sheffield United habían empatado sin goles en un partido que dio una idea de lo que les espera a los aficionados de la Premier League: estadios vacíos, medidas sanitarias estrictas y mucho simbolismo.
Jugadores, árbitros y técnicos pusieron una rodilla en tierra en el momento del pitido inicial, reproduciendo el gesto que se ha popularizado en el movimiento contra el racismo y la brutalidad policial que se inició en Estados Unidos y se ha extendido en todo el mundo.
Un gesto fuerte del campeonato más globalizado y seguido del planeta, con millones de seguidores en todo el mundo.
«Vergüenza» de Guardiola
«Todos estos gestos (de solidaridad) son buenos y positivos. Se debe hacer todo lo que se pueda por hacer que la gente tome consciencia de que no es aceptable», señaló tras el partido el técnico del City Pep Guardiola, que aseguró que tiene «vergüenza» por la manera en la que los blancos han tratado a las personas negras desde hace siglos.
Más simbolismo: el delantero del City Raheem Sterling, muy comprometido en la lucha contra los prejuicios racistas y autor de uno de los goles de su equipo, estimó por su parte que «es un paso enorme hacia delante que la Premier League autorice este tipo de homenajes».
«Esto demuestra que las cosas cambian en el buen sentido», concluyó.
También antes de los partidos se guardó un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del COVID-19 y como agradecimiento al personal sanitario que ha combatido la epidemia.
Las protestas antirracistas (que incluyen el lema «Black Lives Matter» en las camisetas) y los homenajes se repetirán el próximo fin de semana, en los 10 partidos de la jornada 30 de la Premier League, la primera que se disputará al completo tras la reanudación.
El minuto de silencio también fue un momento muy emotivo, ya que por ejemplo, Guardiola perdió a su madre por esta enfermedad, al igual que el técnico del Aston Villa Dean Smith con su padre, uno de los 42.000 fallecidos en el Reino Unido por la epidemia.
Ron Smith solía trabajar como ‘steward’ en los partidos del Villa Park, por lo que el club decidió colocar una de las llamativas chaquetas naranja que lleva este personal en las gradas vacías.
«Es un gesto fantástico del club», declaró Smith al canal Sky Sports. «Mi corazón está con todos aquellos que han perdido a alguien en este periodo», añadió.
Tras la reanudación del fútbol en Alemania, España e Italia, las Premier League se convierte en el cuarto gran campeonato europeo en regresar y deja a la Ligue 1 francesa como la única que no lo ha hecho.
Polémica por el VAR
El regreso del fútbol en Inglaterra estuvo también marcado por la polémica, ya que el árbitro no concedió un claro gol del Sheffield United por un error en la tecnología del ‘Ojo de Halcón’, que le hubiese supuesto la victoria ante el Aston Villa (0-0), muy importante en las aspiraciones de este club por jugar la próxima temporada en Europa.
«No sé si reír o llorar», reaccionó el entrenador del Sheffield Chris Wilder ante un error que llevó a la empresa suministradora de este servicio a pedir excusas.
Estos dos partidos son los primeros de los 92 que restan para completar el campeonato en el próximo mes y medio, en un final frenético para deleite de los aficionados y preocupación para los técnicos, como ya declaró en los últimos días Guardiola, que vio confirmados sus temores a un aumento de las lesiones.
«Estamos preocupados porque tres semanas no es suficiente preparación, no como en Alemania o España, que tuvieron cinco o seis semanas. Sabemos que no es suficiente, pero es lo que hay», había declarado el martes.
«Estamos preparados para jugar un partido, pero tres días después otro y cuatro días después otro, no estamos preparados», añadió.
Y en el Etihad Stadium varios jugadores sufrieron problemas físicos, aunque el lesionado más grave fue el joven central español del City Eric García, que se retiró en camilla en los últimos minutos tras recibir un fuerte golpe, visiblemente conmocionado.
«Estamos un poco preocupados por Eric. Respondió bastante bien, pero tenemos que esperar algunas horas», declaró tras el encuentro.
«Está consciente, que es una buena señal, pero tendrán que hacerle más pruebas en el hospital», añadió Guardiola.