Liverpool sacó una nueva distancia en la cima de las posiciones de la Premier League al cumplir en casa con una goleada frente a Newcastle (4-0) y aprovechar la caída de su inmediato perseguidor, Manchester City, al cual ahora le saca siete puntos.
Los de Jürgen Klopp marcaron las diferencias en el terreno de juego de Anfield al mostrarse como protagonista e impedir que su rival, 15º en las posiciones y que tuvo a José Salomón Rondón en el banco de suplentes, pudiera tomar las riendas o atinar a alguna llegada de riesgo.
Dejan Lovren apareció temprano en el partido al tomar de aire un balón suelto dentro del área. Su disparo, alto y con buen efecto, hizo inútil la estirada de Martin Dubravka.
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Pese a la clara superioridad, los Reds no pudieron ampliar la cuenta en la primera mitad, aunque se guardaron los cartuchos para el complemento.
Mohamed Salah se inventó a los 2′ una polémica infracción dentro del área, la cual el referee sancionó y le otorgó la chance al propio egipcio de anotar desde el punto del penal, a pesar de que el arquero visitante le adivinó la dirección al remate.
A 12 minutos del final, los locales orquestaron una notable acción colectiva, que derivó en el centro de Trent Alexander-Arnold y la definición con el arco a su merced de Xherdan Shaqiri. Poco después fue Fabinho quien ganó en las alturas para convertir de cabeza y firmar un marcador abultado, el cual pudo haber tenido un gol adicional si no fuera por la mala puntería de Sadio Mané sobre el cierre del juego.
Liverpool se consolida como el mejor equipo de la Liga inglesa, mantiene su invicto con 16 victorias y 3 empates y el sábado intentará cerrar su espectacular 2018 en un partido de riesgo en Anfield contra Arsenal.
Foto: PAUL ELLIS/AFP/Getty Images
