El guardameta se marcha al Al-Hilal y deja 20 millones de euros en las arcas sevillistas
El último servicio de Bono al Sevilla no pudo repercutir en un nuevo título para las vitrinas rojiblancas. El marroquí estuvo cerca de convertirse nuevamente en salvador de los suyos, atajando disparos de los atacantes del City, y héroe en una tanda de penaltis donde estuvo cerca de parar el último lanzamiento de los ingleses. Ha sido el último encuentro del meta como sevillista ya que el jugador no regresó con el resto de la expedición a Sevilla y se quedó en Atenas para ingresar directamente desde allí en las filas del Al-Hilal. En Arabia Saudí terminará de concretar los términos de sus contrato y pasar reconocimiento médico.
El acuerdo alcanzado con el Sevilla para el traspaso se cifra en torno a los 20 millones de euros. Todos los protagonistas del encuentro, tras la final, se refirieron a la salida del portero sin terminar de concretarla, pero era un secreto a voces. Quizás el más claro fue Mendilibar durante la rueda de prensa posterior a la derrota en los penaltis aseguraba que Bono difícilmente iba a continuar esta temporada como guardameta del Sevilla.
Ahora el Sevilla tiene que afanarse en encontrar un sustitutos de garantías para un puesto que en los últimos años ha estado bien cubierto. Dominik Livakovic, el portero titular de la selección croata, parece que puede ser el principal candidato. El meta del Dinamo de Zagreb ha sonado con fuerza en las últimas semanas ya que ha estado en la órbita de algunos equipos españoles.
Ugurcan Cakir, internacional turco del Trabzonspor, es otro de los nombres que tiene en la lista Victor Orta, según apunta el diario As. Son dos nombres que vienen sonando en un mercado que debe agitarse cuando se encara la recta final para que se produzca su cierre.