Inter recibía a Palestino en el Beira-Río por la cuarta fecha del Grupo A de la Copa Libertadores, pero el interés también estaba en otra parte del continente, más allá de los hinchas del Colorado y del conjunto chileno.
Por un lado, River estaba atento al resultado, ya que pelea con Palestino la clasificación a los octavos de final de la Copa, pero los millonarios no eran los únicos ojos posados en el partido. En Perú también había un gran interés, por Alianza Lima, el cuarto integrante del grupo, y también por la presencia del ídolo inca, Paolo Guerrero, quien jugaba su segundo partido tras la vuelta de la sanción por dóping que lo tuvo ocho meses fuera de las canchas.
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Y el Depredador no decepcionó. A los dos minutos Paolo tuvo la primera, pero no llegó a conectar un centro rasante desde la derecha. A los 22 Guerrero tuvo su revancha, y se desquitó de la mejor manera. Recibió en la medialuna del área, se sacó de encima a un defensor con un enganche magistral y, de derecha, definió ante la salida del arquero para poner el 2-0 para Inter, que se había adelantado en el marcador a los 11 por medio de Patrick.
Cuando era todo color rojo, Palestino apareció para poner un poco de hielo en la fiesta del Beira-Río. El argentino Julián Fernández cabeceó al palo un centro desde la derecha, tomó su propio rebote y la mandó a la red para poner las cosas 1-2 antes del descanso. Y para terminar de enfríar las cosas, Lucas Passerini consiguió la igualdad apenas iniciado el segundo tiempo.
Pero claro, en Inter está Paolo Guerrero. Y si está Paolo, habrá goles. El peruano recibió un gran centro de Andrés D’Alessandro desde la derecha, se elevó en el área chica y la ubicó, de cabeza, junto al segundo palo para poner las cosas 3-2, que terminaría siendo el resultado final.
De esta manera, Inter llegó a los 10 puntos y se metió en los octavos de final. Palestino, por su parte, quedó con 4, mientras que River (3) juega el jueves ante Alianza Lima (1) en el Monumental de Núñez.
