The Rock comentó el episodio que vivió cuando participó en WrestleMania 13. Según la estrella, ese momento definió su rumbo en la lucha libre.

En el conocido podcast de Oprah, The Rock fue invitado y conversó sobre su carrera en la lucha libre y el cine. El episodio se centró en un punto específico de su vida, en el momento que participó en el WrestleMania 13, que lo ayudó a cambiar su punto de vista en el mercado del wrestling profesional.

Comencé mi carrera llamándome Rocky Maivia, odiaba ese personaje porque si bien amo a mi familia, no quería depender de su legado familiar o usar el nombre de mi padre y mi abuelo. Yo quería ser un novato como los demás, el niño bueno que se estaba preparando para hacer un gran luchador“.

WWE me enseño a que debo respetar el nombre de mi personaje y que cada vez que tuviera que salir a luchar, debía poner una sonrisa grande en mi cara. Se supone que de esa manera, estaba agradeciendo a la empresa por la oportunidad. Cada vez que subía al ring, sonreía, incluso si perdía. A los pocos meses, fui Campeón Intercontinental y al mes me permitieron participar en WrestleMania“.

Cuando fue ese gran día, WrestleMania 13 en Chicago. Escuché a 16,000 personas cantar ‘Rocky apesta’. Recuerdo estar acostado en el ring y el árbitro me dijo: ‘no los escuches‘. Ese momento fue paralizante para mí, pensé que ya no le gustaba a la gente, que no se conectaban conmigo. Me definió para siempre“.

Cuando terminó mi lucha, hablé con los directivos de WWE y les pregunté si podía dejar de ser Rocky Maivia y ser yo mismo, quería dirigirme a la multitud y mostrarme tal cual soy”. Vince McMahon aprobó mi idea y al día siguiente, en RAW, agarré el micrófono y me dirigí al público diciéndoles: ‘Puedo ser muchas cosas, pero apestar no es una de ellas“.